Hemingway y un filme de Hollywood en La Habana
La prensa internacional ha dedicado espacio en las últimas semanas a la cinta biográfica Papa, sobre la amistad entre el reconocido escritor Ernest Hemingway y un periodista admirador. Esta entrega se convirtió en la primera película de Hollywood filmada en Cuba en más de medio siglo. Papa es una producción canadiense-cubano-estadounidense que pudo filmarse en La Habana tras obtener una licencia del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, aunque sujeta a límites de gastos. Para su director, Bob Yaris (El ilusionista y Crash), no había locación alternativa posible.
Según el director le apasionaba la idea de realizar el filme en Cuba, tal cual describía en el guión, los lugares, como la finca en que vivió Hemingway, el Morro, etc.
El largometraje se basa en las memorias de Denne Bart Petitclerc, el joven periodista que viaja a La Habana en la década de 1950 a conocer a Hemingway y que es interpretado en la cinta por Giovanni Ribisi.
Tras escribir una nota en el Miami Herald, recibe una llamada que inicialmente atribuye a una broma de sus colegas y en la cual Hemingway -interpretado por el veterano actor Adrian Sparks- elogia su publicación.
Por décadas, filmes cuya trama acontecía en Cuba -entre ellos El padrino II y Havana, un drama de 1990 protagonizado por Robert Redford que abrió una Festival del Nuevo Cine Latinoamericano- debieron ser filmados en otras locaciones. En el caso de Havana, el entorno de la capital cubana debió ser recreado en la República Dominicana.
Esta vez, el equipo de filmación de Papa tuvo acceso a sitios claves en la vida del novelista, autor de, Por quién doblan las campanas, y otros interesantes textos. Hemingway vivió en Cuba entre 1939 y 1960, lugares como la Finca Vigía, en las afueras de La Habana, y el estudio donde escribió El viejo y el mar. Sus obras le abrieron el camino para lograr el premio Pulitzer y un Nobel de Literatura.
Otras escenas fueron grabadas en el antiguo Palacio Presidencial, hoy Museo de la Revolución, y en el Gran Teatro de La Habana.
Papa, realizada como ficción y con fines comerciales, pasó la barrera del bloqueo y sus regulaciones al ser calificado técnicamente como documental, dado que se basa en una historia real. Del lado cubano, el ICAIC contribuyó al empeño de los productores estadounidenses con locaciones, actores y vestuario.
“Hemingway fue probablemente el estadounidense más prominente que hizo de Cuba su hogar, y creo que desde entonces hasta hoy los cubanos lo aprecian y lo quieren. Este filme pudiera ser una contribución a tender puentes entre estos dos pueblos y culturas”, afirmó el realizador.
Fuente consultada: cinelatinoamericano.org