Dalí, el Cine y la Pintura
Salvador Dalí, pintor español que logró un inmenso prestigio y popularidad. Fue cineasta con Buñuel y logro filmar dos importantes películas, la famosa secuencia de ojo de la heroína seccionado por una hoja de afeitar en un perro andaluz sigue siendo una de las escenas más impactantes en la historia del cinematográfico, como también la mano llena de hormigas, imágenes recurrentes en muchas de sus obras que quedan en la memoria.
Algunas de las imágenes utilizadas en el cine aparecen ya en pinturas surrealistas como la, temprana Aparato y mano, de 1927, Dalí creía que el cine estaba impregnado de magia y tenía verdaderamente admiración por los grandes cómicos del cine mundo, la mayoría de sus guiones son frustrados rebosantes de imágenes oníricas, castraciones y otras fantasías sexuales, características propias del movimiento surrealista del siglo XX.
En 1945, firmó un contrato con Walt Disney para filmar un cortometraje de animación de pocos minutos de duración que debía combinar ballet y dibujos animados, en el filme se mezclan bailarinas, jugadores de béisbol, hormigas convertidas en bicicletas, tortugas gigantes y la Torre de Babel, no sigue una trama lógica, y deja gran parte del argumento en manos de la imaginación del espectador, el proyecto fue cancelado por diversos problemas, entre ellos la crisis económica que siguió al final de la II Guerra Mundial.
Adaptó la técnica de escritura automática a la pintura, una forma de creación particularmente apropiada para la animación, ya que permite mezclar y ensamblar libremente imágenes salidas directamente del inconsciente. En el filme se mezclan bailarinas, jugadores de béisbol, hormigas convertidas en bicicletas, tortugas gigantes y la torre de babel, no sigue una trama lógica y deja gran parte del argumento en manos de la imaginación del espectador. Dalí siempre decía: “Si lo entendéis, he fracasado”.